Pensamos que personaje nos gustaría ser. Armamos con crealina nuestro propio personaje. Luego nos preguntamos: ¿Dónde esta nuestro personaje? Decidimos, así, armar un entorno. Buscamos material reciclable y armamos el lugar para el personaje. Pintamos. Y finalmente, escribimos la historia.
COLGADOS, De Lucas.
Ocurrió un día muy lindo en Venteciano.
Todos estaban en la playa y de pronto un gran piesote… ¡plaammmppp! Todo se movió.
Luego apareció un gran robot con su risa (¡jajajajaja!) ahí el robot piso todo lo que encontró, piso sombrillas, reposeras, hasta un carrito de salchichas. Claro, cuando piso el carrito tenia una garrafa y… ¡puuuff!.
El robot estalló.
Al día siguiente apareció una bruja de magia negra, su vestido era todo negro, pelo blanco, ojos saltones y aterradores. Ahí fue distinto, la bruja hizo una ola tamaño gigante, más grande que un edificio de 100 pisos. Como era invierno, la ola cuando iba a romper se congelo; se volvió hielo solido, duro, y frio. En ese momento, la bruja se enfermo. Estornudo y le salió fuego de su nariz, fuego como los dragones; derritió la ola y la llevo a un poste donde se quedo colgada por un cable…gritando y gritando.
Fin.
EL HOMBRE ABURRIDO, De Melany
Había una vez un anciano que estaba aburrido en su casa y dijo: - mejor voy a la plaza a tomar aire fresco y a tomar mate y a ver como la gente se divierte.
Estaba contentó tomando mate y viendo a los niños como se divierten con su familia.
El anciano decidió irse porque ya hacia frio y era de noche. Por el camino se encontró con un hombre amigo, que estaba solo.
El amigo le dijo:- vamos a tomar un vino.
El anciano respondió: - no, ya es de noche y hace frio.
El hombre insistió: - vamos, porque sino te mato.
El anciano asustado y sorprendido le dijo que si, porque el hombre le puso un arma en la cabeza.
Fueron al bar de su hijo, el hombre lo llevó al baño de los mafias. El anciano tenía un teléfono escondido en su bolsillo y llamó a la policía. Cuando la policía llegó, arresto a todos los mafias y también al hijo del hombre.
El anciano le dijo a los policías que el no era mafia y los policías respondieron que si, que el era mafia, y el hombre dijo: - me engañaste, sos un traidor.
El anciano se quedo solo, muy solo; triste, sin su familia. Quedo destrozado.
Fin.
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